Mezclamos los ingredientes del poolish, tapamos con film de plástico y lo dejamos fermentar hasta la mañana siguiente.
- Si lo hacemos el mismo día un mínimo de 4 horas.
- Si, no la vamos usar antes de 8 horas, lo metemos en la nevera.
Mezclamos todo el poolish, agua, el aceite, la harina y la levadura.
Amasamos a mano unos 10 minutos.
Añadimos la sal.
- Ponemos la sal al final para evitar que destruya la lavadura.
Amasamos otro 5 minutos más.
- Ahora la masa estará suave y elástica.
Como la mayoría de las masa muy hidratadas, podemos usar un robot de cocina o Thermomix para el amasado.
- Esta masa tiene una hidratación mayor del 70% y de aceite del 13%.
- Si lo hacemos en un robot de cocina, lo amasaremos durante 5 a 7 minutos.
Lo metemos en un bol y aceitamos toda la superficie, tapamos con film de plástico y dejamos que leve unos 45-60 minutos (depende de la temperatura).
- Aceitamos la parte superior, para que no se reseque la masa.
Pasado este momento la masa habrá duplicado su volumen.
Forramos la bandeja con papel de horno, y la untamos generosamente de aceite, para que la focaccia no se pegue, al hornearla.
Ponemos la masa sobre una bandeja.
Con ayuda de los dedeos extendemos la masa hasta los bordes (sin romper la masa).
- Si resiste, dejar reposar y volver a extenderla pasados 15 minutos.
Tapamos con papel film.
- Ponemos 2 cucharadas de aceite sobre la masa.
- Este aceite, permitirá que la corteza quede crujiente.
Tapamos con film de plástico y dejamos reposar en un lugar protegido de corrientes de aire, durante unos 45 minutos.
Precalentar el horno a 250 ºC.
Pasado este tiempo, presionamos la masa con los dedos para formar unos hoyos.
Añadimos unas 4 cucharadas sopera de aceite sobre la superficie de la masa.
- Dejamos reposar el tercer levado unos 30 minutos más.
- La masa habrá duplicado su altura.
Este es el momento de poner las hierbas aromáticas que más nos gusten.
- Es muy típico el romero.
- A nosotros nos gustan también las focaccias con hierbas provenzales.
Al terminar el tercer levado, horneado a 220 ºC (arriba y abajo), durante unos 10 minutos.
Pasado este tiempo, sacamos la focaccia del horno y ponemos los ingredientes de cobertura (cebolla, aceitunas y queso).
- Esto se hace a media cocción para evitar que se quemen.
Incorporamos cebollas cortada en aros.
Las aceitunas negras partidas por la mitad.
Y el queso rallado.
- Volvemos a meter la focaccia en el horno, y giramos la bandejas 180 º, para que se hornee de forma uniforme, durante otros 10 minutos.
- El queso se debe fundir pero no quemarse.
Sacamos la focaccia de la bandeja y la dejamos atemperar (sin el papel de horno) sobre una rejilla metálica.
- La focaccia debe quedar con un tono marrón tostado claro.
- Este tiempo de enfriado, debe ser de unos 30 minutos, aproximadamente.
Al sacar la focaccia, la pincelamos con aceite, sobre la superficie caliente.
Cortamos la focaccia con unas tijeras y la servimos con un antispasto.
Ingredientes
Instrucciones
Mezclamos los ingredientes del poolish, tapamos con film de plástico y lo dejamos fermentar hasta la mañana siguiente.
- Si lo hacemos el mismo día un mínimo de 4 horas.
- Si, no la vamos usar antes de 8 horas, lo metemos en la nevera.
Mezclamos todo el poolish, agua, el aceite, la harina y la levadura.
Amasamos a mano unos 10 minutos.
Añadimos la sal.
- Ponemos la sal al final para evitar que destruya la lavadura.
Amasamos otro 5 minutos más.
- Ahora la masa estará suave y elástica.
Como la mayoría de las masa muy hidratadas, podemos usar un robot de cocina o Thermomix para el amasado.
- Esta masa tiene una hidratación mayor del 70% y de aceite del 13%.
- Si lo hacemos en un robot de cocina, lo amasaremos durante 5 a 7 minutos.
Lo metemos en un bol y aceitamos toda la superficie, tapamos con film de plástico y dejamos que leve unos 45-60 minutos (depende de la temperatura).
- Aceitamos la parte superior, para que no se reseque la masa.
Pasado este momento la masa habrá duplicado su volumen.
Forramos la bandeja con papel de horno, y la untamos generosamente de aceite, para que la focaccia no se pegue, al hornearla.
Ponemos la masa sobre una bandeja.
Con ayuda de los dedeos extendemos la masa hasta los bordes (sin romper la masa).
- Si resiste, dejar reposar y volver a extenderla pasados 15 minutos.
Tapamos con papel film.
- Ponemos 2 cucharadas de aceite sobre la masa.
- Este aceite, permitirá que la corteza quede crujiente.
Tapamos con film de plástico y dejamos reposar en un lugar protegido de corrientes de aire, durante unos 45 minutos.
Precalentar el horno a 250 ºC.
Pasado este tiempo, presionamos la masa con los dedos para formar unos hoyos.
Añadimos unas 4 cucharadas sopera de aceite sobre la superficie de la masa.
- Dejamos reposar el tercer levado unos 30 minutos más.
- La masa habrá duplicado su altura.
Este es el momento de poner las hierbas aromáticas que más nos gusten.
- Es muy típico el romero.
- A nosotros nos gustan también las focaccias con hierbas provenzales.
Al terminar el tercer levado, horneado a 220 ºC (arriba y abajo), durante unos 10 minutos.
Pasado este tiempo, sacamos la focaccia del horno y ponemos los ingredientes de cobertura (cebolla, aceitunas y queso).
- Esto se hace a media cocción para evitar que se quemen.
Incorporamos cebollas cortada en aros.
Las aceitunas negras partidas por la mitad.
Y el queso rallado.
- Volvemos a meter la focaccia en el horno, y giramos la bandejas 180 º, para que se hornee de forma uniforme, durante otros 10 minutos.
- El queso se debe fundir pero no quemarse.
Sacamos la focaccia de la bandeja y la dejamos atemperar (sin el papel de horno) sobre una rejilla metálica.
- La focaccia debe quedar con un tono marrón tostado claro.
- Este tiempo de enfriado, debe ser de unos 30 minutos, aproximadamente.
Al sacar la focaccia, la pincelamos con aceite, sobre la superficie caliente.
Cortamos la focaccia con unas tijeras y la servimos con un antispasto.