
Pedimos a nuestro carnicero que nos corte las pechugas de pollo en filetes finos.
Sacamos el pan brioche de su bolsa.
Sacamos las lonchas de queso emmental y cheddar.
Untamos las rebanadas de pan con mantequilla.
Preparamos el tomate, la lechuga, los pepinillos y el huevo duro.
Freímos el pollo, por los 2 lados, en una sartén.
Ponemos las lonchas de queso sobre el pan y lo calentamos en otra sartén antiadherente.
Rellenamos las rebanadas con el pollo, el huevo, el tomate, la lechuga y pepinillos, tostamos el pan por las 2 caras.
Colocamos el sándwich sobre un plato.
Y lo cortamos por la mitad.
Buen provecho.