Es una receta muy sencilla, por para que salga perfecta debemos:
- La calidad de los ingredientes será muy importante.
- Sobre todo los croutons de pan, mejor hechos en casa.
- Mezclar bien todos los ingredientes de la salsa César.
- Para que la ensalada César no quede mustia, es importante aliñarla justo antes de servir.

Precalentamos el horno a 180° C, colocamos los dados de pan en una bandeja para hornear sin engrasar y las horneamos durante unos 15 minutos hasta que queden crujientes.
- Los pincelamos con 2 cucharada de aceite y las volvemos a hornear para que se doren durante unos 10 minutos más.
- También podemos freírlos, pero al horno son mas saludables.

Sumergimos el huevo en agua hirviendo y lo cocemos durante un minuto.
- Reservamos la yema del huevo para la salsa.

Majamos el ajo junto al aceite de oliva, la yema de huevo cocida, las anchoas, la salsa Wircertershide, el zumo del limón, la sal y la pimienta.
- Mezclamos todo bien durante unos minutos y reservamos.
- Usaremos aceite de oliva virgen extra tipo arbequinas (es dulce y afrutado), ideal para mayonesas, allioli, vinagreta y otras salsas emulsionadas, como la César.
- Cuidado con la sal, pues las anchoas ya tienen sal.
- La salsa la puedes hacer en la batidora, pero la emulsión que consigues con el mortero y unos minutos de movimiento es espectacular.

Añadimos el queso Parmesano.
- El Parmesano nos ayudará a corregir la acidez de la salsa por eso se añade al final
- También se espolvorea sobre la lechuga una vez servida.

Freímos las pechugas de pollo con un poco de aceite en una sartén.

Lavamos y cortamos la lechuga, la secamos y la guardamos en la nevera para que conserve su textura crujiente.

Montamos en una ensaladera la lechuga, añadimos por encima las pechugas de pollo y el queso Parmesano rallado, a continuación los croutons de pan y por último aliñamos con la salsa César al gusto.