
Ponemos en el fuego una cazuela grande con toda la carne y los huesos y lo cubrimos de agua fría hasta 3 dedos por encima.
- No debemos excedernos del nivel de agua o no se gelatinizará correctamente.
También hervimos los huevos durante 10 minutos.
Cuando empieza a hervir, bajamos la temperatura a fuego lento durante 1 hora.
Con una espumadera vamos quitando toda la espuma que se forme.
Pasado este tiempo, agregamos las: zanahoria, cebolla, pimienta, ajo, hoja de laurel y la sal, cocemos a fuego lento otras 2 horas más.
Sacamos la cebolla y la zanahoria y dejar a cocer otras 1,5-2 horas más.
- Cortamos las zanahorias en rodajas finas para la decoración.
- El resto de verduras no las usaremos.
Pasado este tiempo, sacamos toda la carne de la olla y dejamos que se enfríe un poco.
- Separar toda la carne de los huesos y cortar en trozos pequeños.
- Reservar la carne que ha salido con buena apariencia y descartar el resto ya que la presentación es muy importante.
- Descartamos las manitas de cerdo y de pollo, que nos han servido para gelatinizar el caldo.
Pasamos el caldo por un colador muy fino y después por una muselina humedecida. Reservamos.
- Debemos obtener un caldo muy claro.
Empezamos colocando las rodajas de zanahorias en el fondo del molde (que luego será la parte de arriba del holodetz) con un poco de eneldo si se desea.
- Ponemos en el fondo de un recipiente grande (o en varios pequeños).
Añadimos los huevos duros cortados en rodajas para que salga más bonito.
Ponemos la carne en el fondo del recipiente, de forma atractiva, ya que se verá a través de la gelatina.
Si nos gusta el ajo, podemos añadir 1-2 dientes de ajo cortado en rodajas.
Finalmente, añadimos el caldo (muy limpio), cubriendo la carne y un poco más.
- El caldo no debe sobrepasar más de 1 cm por encima.
Cubrir el recipiente con el papel film y poner en el frigorífico para comer al día siguiente.
Para desmoldar un áspic da buen resultado sumergir el molde unos segundos en agua caliente para que se despegue con facilidad.
- Su presentación es impecable una vez decorada.
Este suculento plato se sirve frio.
Se sirve con kétchup, vinagre de vino o mostaza. Lo que le guste más.
Ingredientes
Instrucciones
Ponemos en el fuego una cazuela grande con toda la carne y los huesos y lo cubrimos de agua fría hasta 3 dedos por encima.
- No debemos excedernos del nivel de agua o no se gelatinizará correctamente.
También hervimos los huevos durante 10 minutos.
Cuando empieza a hervir, bajamos la temperatura a fuego lento durante 1 hora.
Con una espumadera vamos quitando toda la espuma que se forme.
Pasado este tiempo, agregamos las: zanahoria, cebolla, pimienta, ajo, hoja de laurel y la sal, cocemos a fuego lento otras 2 horas más.
Sacamos la cebolla y la zanahoria y dejar a cocer otras 1,5-2 horas más.
- Cortamos las zanahorias en rodajas finas para la decoración.
- El resto de verduras no las usaremos.
Pasado este tiempo, sacamos toda la carne de la olla y dejamos que se enfríe un poco.
- Separar toda la carne de los huesos y cortar en trozos pequeños.
- Reservar la carne que ha salido con buena apariencia y descartar el resto ya que la presentación es muy importante.
- Descartamos las manitas de cerdo y de pollo, que nos han servido para gelatinizar el caldo.
Pasamos el caldo por un colador muy fino y después por una muselina humedecida. Reservamos.
- Debemos obtener un caldo muy claro.
Empezamos colocando las rodajas de zanahorias en el fondo del molde (que luego será la parte de arriba del holodetz) con un poco de eneldo si se desea.
- Ponemos en el fondo de un recipiente grande (o en varios pequeños).
Añadimos los huevos duros cortados en rodajas para que salga más bonito.
Ponemos la carne en el fondo del recipiente, de forma atractiva, ya que se verá a través de la gelatina.
Si nos gusta el ajo, podemos añadir 1-2 dientes de ajo cortado en rodajas.
Finalmente, añadimos el caldo (muy limpio), cubriendo la carne y un poco más.
- El caldo no debe sobrepasar más de 1 cm por encima.
Cubrir el recipiente con el papel film y poner en el frigorífico para comer al día siguiente.
Para desmoldar un áspic da buen resultado sumergir el molde unos segundos en agua caliente para que se despegue con facilidad.
- Su presentación es impecable una vez decorada.
Este suculento plato se sirve frio.
Se sirve con kétchup, vinagre de vino o mostaza. Lo que le guste más.