6 muslos de pollo (con o sin piel, según tu preferencia)
Sal y pimienta al gusto para sazonar
1 kg tomates maduros (pueden ser perita, redondos, o cherry)
1 lata (400g) de tomate triturado o entero pelado
1 cebolla
3 dientes de ajo
Aceite de oliva virgen extra:
Orégano, albahaca, tomillo, laurel, perejil (elige las que más te gusten)
100 ml coñac
Sal y pimienta al gusto para sazonar
Azúcar para contrarrestar la acidez del tomate
1
Saca los muslos de pollo del refrigerador unos 15-20 minutos antes de cocinar para que se atemperen un poco.
* Sécalos con papel de cocina.
* Si lo deseas, sazónalos con sal y pimienta. Reserva.
2
Lava bien los tomates frescos.
* Córtalos según tu preferencia: en trozos grandes, en cuartos, o por la mitad si son cherry.
* Si usas tomate enlatado, ábrelo y tenlo listo.
3
Pela la cebolla.
* Corta la cebolla en juliana (tiras finas) o en brunoise (cubitos pequeños), según la receta que vayas a seguir.
4
Pela los dientes de ajo.
* Pícalos finamente o lamínalos.
5
Si usas hierbas frescas, lávalas y pícalas (excepto el laurel, que se usa entero).
* Si usas hierbas secas, tenlas a mano.
6
Mide la cantidad de vino blanco o caldo que vayas a utilizar y tenla preparada.
7
Ten a mano sal, pimienta y una pizca de azúcar si la vas a usar.
Ingredientes
6 muslos de pollo (con o sin piel, según tu preferencia)
Sal y pimienta al gusto para sazonar
1 kg tomates maduros (pueden ser perita, redondos, o cherry)
1 lata (400g) de tomate triturado o entero pelado
1 cebolla
3 dientes de ajo
Aceite de oliva virgen extra:
Orégano, albahaca, tomillo, laurel, perejil (elige las que más te gusten)
100 ml coñac
Sal y pimienta al gusto para sazonar
Azúcar para contrarrestar la acidez del tomate