
Preparamos el carbón para encender la barbacoa unos 30 minutos antes de cocinar el rodaballo.
Cuando el carbón este rojos lo depositamos sobre la barbacoa.
La parrilla debe estar siempre a media altura para que el rodaballo se tueste lentamente y quede crujiente por fuera y jugoso por dentro.
- Cuando pongamos el pescado, la temperatura de la barbacoa debe ser media-baja, para evitar que se nos queme por fuera y quede sin hacer por dentro.
Mientras tanto quitamos las agallas y las tripas al rodaballo (podemos pedirlo ya limpio, en nuestra pescadería de confianza).
- Lavamos y secamos muy bien el rodaballo (con papel de cocina), para evitar que se nos pegue a la parrilla.
- Hacemos una incisión en la mitad de del cuerpo del rodaballo, con esto penetrara mejor el sofrito que pongamos después y nos será más fácil separar los lomos después de cocinarlos.
- El rodaballo debe estar a temperatura ambiente antes de cocinarlo.
Antes de poner el rodaballo a la brasa hacemos un majado de perejil, ajo, sal gorda, aceite y zumo de limón, lo machacamos todo muy bien en un mortero.
Bañamos el rodaballos con el majado y lo repartimos con una brocha de cocina por las dos caras.
- No pasa nada con poner poca cantidad de majado, ya que después le incorporaremos el sofrito.
Seguidamente ponemos la sal gruesa en ambas caras.
- Debemos añadiendo una cantidad generosa, pero no excesiva, al rodaballo antes de colocarlo, así evitaremos que se nos pegue a la parrilla.
Calentamos la rejilla y posteriormente la engrasamos, colocamos el rodaballo en la barbacoa con la piel (el lado oscuro) mirando hacia las brasas, con calor directo.
- Lo mantendremos entre 8-10 minutos (dependerá del calor de la brasa y del grosor del rodaballo).
- Si el rodaballo es más grande, podemos dejarlo un poco más de tiempo.
- Sabremos que el rodaballo esta listo cuando tenga típicas marcas oscuras de la rejilla.
- Vigilaremos en todo momento las brasas, para mantener la temperatura constante y no se nos queme nuestro pescado.
- La rejilla de pescado, nos facilitará parle la vuelta, sin que se nos rompa el rodaballo.
Transcurrido ese tiempo damos la vuelta al rodaballo, y lo mantenemos otro 6-8 minutos más, para que se haga por el otro lado.
- Conviene tener en cuenta que el pescado se seguirá cocinando después de retirarlo de las brasas.
- Debemos conseguir mantener la piel crujiente y conservar la gelatina de dentro, ya que esto será la clave de un gran resultado.
- Solo le daremos una vuelta, no es apropiado estar dando vueltas constantes al pescado, para que la carne no se rompa.
- Retiramos del fuego y depositamos en una fuente, con la piel hacia arriba.
Mientras se hace el rodaballo, laminamos el ajo.
Hacemos lo propio con la guindilla.
Ponemos el aceite en la sartén y lo calentamos.
Cuando el aceite este caliente, añadimos los ajos y la guindilla, para que se doren ligeramente.
Retiramos del fuego y añadimos el vinagre de manzana.
Una vez cocinado el rodaballo lo salseamos con este sofrito.
- Dejamos reposar un máximo de 2 minutos y serviremos de inmediato, ya que si se nos enfría este plato pierde mucho.
- Le quitamos la piel y separamos los 4 lomos y añadiendo la salsa del sofito en cada plato.
- Antes de servir sazonamos con sal Maldon.
Servimos con una ensalada de hojas de roble.
Y decoramos con unas rodajas de limón, para que cada uno se sirva a su gusto.