
Preparamos los boquerones, quitándoles la cabeza, dejándoles la espina y las tripas.
- Las tripas se dejan para que se produzca, debido a los enzimas que tienen, una reacción química que le dará ese sabor tan original.
- Los boquerones deben ser grandes, ya que sino quedara la anchoa muy pequeña y muy salada.
A continuación vamos colocando en un recipiente: una capa de sal, una capa de boquerones, capa de sal...
Terminamos con una capa generosa de sal gorda.
- Si usásemos sal fina, salaría en exceso la anchoa.
Una vez terminado se pasan a la parte baja del frigorífico (4-6 ºC) o también se pueden conservar en una zona fresca donde permanecerán como mínimo tres meses.
- Cuanto más tiempo pase quedara más seca y con mejor sabor.
- Si queremos acelerar el proceso podemos poner algo de peso encima.
- A temperatura ambiente el proceso se acelera bastante.
- Pasado este tiempo, habremos conseguido una carne mas firme y seca.
- Habrá experimentado cambios bioquímicos por la fermentación, que le darán un particular sabor, distinto al del pescado crudo o de una salazón sin maduración.
Se sacan de la salmuera y se lavan.
Se les retira la piel con la ayuda de un cuchillo (el sobao).
O un estropajo verde de cocina nuevo.
Una vez quitada la piel, se le quitan las tripas y se separa de la espina.
Y una vez limpios cortamos la cola, las espinas laterales y parte de la tripa.
Se lavan los filetes, se escurren bien y se les retira el exceso de agua con un paño o papel de cocina.
Una vez secas se colocan en un recipiente cubiertas con Aceite de Oliva Virgen Extra, donde podrán aguantar un buen tiempo.
- El aceite nos protegerá las anchoas de posibles contaminantes.
- Usaremos un aceite de oliva suave, para no enmascarar el sabor de la anchoa.
Están Buenísimas!!!
Por ejemplo con unas tostas de pan con tomate.
Ingredientes
Instrucciones
Preparamos los boquerones, quitándoles la cabeza, dejándoles la espina y las tripas.
- Las tripas se dejan para que se produzca, debido a los enzimas que tienen, una reacción química que le dará ese sabor tan original.
- Los boquerones deben ser grandes, ya que sino quedara la anchoa muy pequeña y muy salada.
A continuación vamos colocando en un recipiente: una capa de sal, una capa de boquerones, capa de sal...
Terminamos con una capa generosa de sal gorda.
- Si usásemos sal fina, salaría en exceso la anchoa.
Una vez terminado se pasan a la parte baja del frigorífico (4-6 ºC) o también se pueden conservar en una zona fresca donde permanecerán como mínimo tres meses.
- Cuanto más tiempo pase quedara más seca y con mejor sabor.
- Si queremos acelerar el proceso podemos poner algo de peso encima.
- A temperatura ambiente el proceso se acelera bastante.
- Pasado este tiempo, habremos conseguido una carne mas firme y seca.
- Habrá experimentado cambios bioquímicos por la fermentación, que le darán un particular sabor, distinto al del pescado crudo o de una salazón sin maduración.
Se sacan de la salmuera y se lavan.
Se les retira la piel con la ayuda de un cuchillo (el sobao).
O un estropajo verde de cocina nuevo.
Una vez quitada la piel, se le quitan las tripas y se separa de la espina.
Y una vez limpios cortamos la cola, las espinas laterales y parte de la tripa.
Se lavan los filetes, se escurren bien y se les retira el exceso de agua con un paño o papel de cocina.
Una vez secas se colocan en un recipiente cubiertas con Aceite de Oliva Virgen Extra, donde podrán aguantar un buen tiempo.
- El aceite nos protegerá las anchoas de posibles contaminantes.
- Usaremos un aceite de oliva suave, para no enmascarar el sabor de la anchoa.
Están Buenísimas!!!
Por ejemplo con unas tostas de pan con tomate.