MISE EN PLACE

Pelar la piel del limón.
- Evitar la parte blanca (esta es amarga y estropeara la preparación).

Cortar en brunoise (en dados pequeñitos uniformes de unos 5 milímetros).
- Dejar secar un día las pieles de limón.
- También podemos usar un rallador.

Añadimos las pieles de limón a un bote, de un litro, esterilizado.

Incorporar el aceite y tapamos el bote.

Dejar 20 días en el mismo lugar.
- Más tiempo, le dará un sabor más intenso.

Transcurrido este tiempo, tamizar el aceite.

Embotellar el aceite en 4 botellas de cuarto de litro.
- Podemos poner en este momento unas cortezas de limón, para indicarnos el tipo de aceite que hay en la botella.

Tendremos un aceite ideal (con un sabor y aroma delicioso), para condimentar: ensaladas, pescados, mariscos, capaccios, arroces de pescado o salsas.