Separamos las yemas de las claras.
Incorporamos las yemas a un bol.
Y batimos las yemas de huevo, hasta obtener una mezcla cremosa.
Añadimos el azúcar al bol, menos una cucharada que usaremos para la clara de huevo.
Seguimos mezclando hasta obtener una mezcla espumosa.
En un cazo calentamos la leche a fuego bajo, sin dejar que hierva.
Incorporamos los clavos,
y la rama de canela.
Mezclamos todo bien.
Incorporamos la leche poco a poco en el bol de de las yemas y removemos todo sin parar.
Pasamos el contenido por un colador, para separa los clavos.
Añadimos la nata,
el extracto de vainilla,
la nuez moscada (opcional),
y el ron blanco y el vodka, mezclamos todo bien y dejamos enfriar en la nevera.
En otro bol batimos las claras de huevo, junto con una cucharilla de azúcar, hasta obtener el punto de nieve.
Sacamos el ponche de la nevera, incorporamos por encima las claras montadas,
Añadimos la canela en polvo al gusto.
Servimos el ponche frio en copas cubiertas con las claras montadas y espolvoreadas con canela molida (1).
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200 g
* El % del valor diario (VD), indica cuánto contribuye un nutriente a la ingesta diaria, de un adulto medio (8400 kJ / 2000 kcal).