Pelamos y cortamos las patatas, en rodajas de 2 cm.
Las salamos y pasamos por harina y huevo batido.
Freímos las patatas.
Hasta que estén doradas. Las patatas deben quedar un poco crudas, ya que se van a guisar posteriormente.
Las depositamos en una cazuela.
En una sartén freímos la cebolla y los ajos hasta que se doren. Para dar color y consistencias a la salsa.
Posteriormente añadimos el caldo y removemos hasta que hierva.
Incorporamos la salsa en la cazuela con las patatas. Rectificamos de sal, pimienta y perejil.
Añadimos el brandy y guisamos a fuego medio, durante 1 hora o hasta que las patatas estén tiernas. No introducir la cuchara para no romper las patatas, para remover hacer girar la cazuela.
Si la salsa nos queda muy liquida, la podemos espesarla con Maicena.
Emplatar y espolvorear con perejil picado.