Si tenemos la suerte de tener una árbol de naranjas amargas, nos ponemos a recogerlas.
Pelamos las naranjas.
Pero si la vamos a hacerla con piel, la rallamos con un rallador antes de pelarlas.
Exprimimos los limones.
Colocamos las naranjas, en la cazuela junto con el agua.
Añadimos las pipas de naranja en una bolsa de tela cerrada.
Una vez pasado este tiempo, agregamos el azúcar, y seguimos con la cocción a fuego suave unos 10 minutos más, removiendo, para que no se queme el azúcar.
Después de este tiempo, trituramos la mermelada.
Ahora añadimos el zumo de limón y proseguimos la cocción 10 minutos más, removiendo de vez en cuando.
La mermelada nos producirá espuma.
Espumamos al acabar la cocción (esto se hace al final ya que esta contiene pectina).
Para saber sí se ha alcanzado el punto poner un poco en una cuchara sacada del congelador, recogemos un poco de mermelada y si no gotea es el momento de embotar.
Mientras tanto, esterilizamos los botes (recién sacados del lavaplatos) en el microondas, se introducen medio llenos de agua durante unos 10 minutos.
Las tapa la hervimos 5 minutos en una cacerola.
Rellenamos los tarros estériles hasta el cuello.
Realizamos el vació a los botes poniéndolos boca abajo, hasta que se enfríen.
Etiquetamos el tipo de mermelada y la fecha, la almacenamos en un lugar oscuro, seco y fresco hasta su consumo.
Esperamos que enfríe y espese antes de ser utilizada.
A Javier le encanta la Mermelada de Naranjas Amargas.
30 raciones
25 g
* El % del valor diario (VD), indica cuánto contribuye un nutriente a la ingesta diaria, de un adulto medio (8400 kJ / 2000 kcal).