

Precalentar el Horno a 180 °C.

Con un cuchillo afilado, hacemos cortes poco profundos en la superficie del jamón, formando un patrón de rombos.

En el centro de cada rombo, insertamos un clavo de olor entero para aromatizar (opcional).

Mezclamos en un cazo el almíbar de la lata de piña, el azúcar moreno, la miel y la mostaza de Dijon (si la usas).

Bañamos con una brocha el jamón con una parte del glaseado (la brocha nos ayudará a cubrir bien la superficie y los cortes).

Colocamos las rodajas de piña alrededor del jamón con palillos de dientes.

Ponemos una cereza marrasquino en el centro de cada rodaja de piña con unos palillos de dientes.

Ponemos el jamón en una fuente de horno y lo horneamos a 180 °C, durante unos 30 a 45 minutos (dependiendo del tamaño del jamón).

Es importante bañar el jamón con el resto del glaseado y los jugos que suelte en la fuente cada 15 minutos.

En los últimos 10 minutos de cocción, subimos la temperatura del horno a 200 °C (o poner la función grill) para que el glaseado se caramelice y dore ligeramente la superficie.

Retiramos el jamón del horno.

Y dejamos reposar cubierto con papel de aluminio, durante al menos 10 a 20 minutos.

Servimos bañado con el glaseado de la fuente.

Retiramos los palillos y los clavos antes de cortarlo en lonchas de un 1 cm de grosor.

8 raciones
150 g
* El % del valor diario (VD), indica cuánto contribuye un nutriente a la ingesta diaria, de un adulto medio (8400 kJ / 2000 kcal).