Tamizamos la harina sarraceno y la reservamos en un bol junto con la sal.
En un plato batimos ligeramente los huevos.
Añadimos poco a poco los huevos batidos al bol con la harina tamizada,
- Batimos vigorosamente con la batidora de varillas.
- Es importante evitar grumos en la masa.
Ponemos el agua y seguimos batiendo.
La masa final debe quedar espumosa.
Mantenemos la masa tapada en la nevera un mínimo de 2 horas, lo ideal seria de un día para otro.
- Al sacar la masa debe quedar untuosa, sí está muy densa, podemos incorporar un poco de leche, removiendo bien.
Calentamos la sartén, esta debe estar suficientemente caliente para que la masa cuaje con rapidez.
- En esta sartén que me regalaron los Reyes Magos, hay un indicativo de que se ha llegado a la temperatura adecuada.
- Tampoco es adecuado que este muy caliente, ya que en este caso se dorará la crepe antes de cocerse.
Ponemos mínimamente en la sartén con un poco de aceite de girasol o mejor mantequilla.
Untamos con una brocha de cocina.
Retiramos el exceso de grasa con un papel de cocina.
Con un cucharon vertemos un poco de masa en la sartén caliente.
Removemos la sartén para que la masa recubra ligeramente toda la superficie.
Dejamos cocinar la crepe durante 1 ó 2 minutos aproximadamente.
Cuando la parte inferior adquiera un color dorado pálido
Le damos la vuelta con la espátula.
Hacemos un circulo de queso rallado.
Ponemos el huevo y mezclamos la clara con el queso rallado.
Añadimos la sal y pimienta al gusto.
Ponemos las lonchas de queso.
Añadimos el jamón york (o fiambre de pavo si lo preferimos).
Doblamos las esquinas para hacer un cuadrado.
Opcionalmente, la cocinamos por la otra cara si queremos que el huevo quede más cuajadas.
6 raciones
100 g
* El % del valor diario (VD), indica cuánto contribuye un nutriente a la ingesta diaria, de un adulto medio (8400 kJ / 2000 kcal).