Ponemos en remojo las alubias la noche anterior.
Cortamos la cebolla, el ajo, la zanahoria y el pimiento muy fino.
Las ponemos a hervir bien cubiertas de agua y sin añadir sal hasta que estén tiernas pero firmes, reservamos las alubias y el caldo, unos 60 minutos.
Ponemos aceite en el fondo de una cazuela y añadimos la cebolla y cuando este transparente ponemos el ajo.
Incorporamos la cayena.
Añadimos la zanahoria y el pimiento.
Luego ponemos el pimentón.
Incorporamos el tomate triturado, la sal, el azúcar, la salsa Worcestershire, la miel, el vinagre y las hierbas (mejor en ramilletes para poderlos retirar luego) y mezclamos bien.
Incorporamos las alubias escurridas y regulamos el nivel de liquido (añadiendo parte del liquido de cocer las alubias, si fuese necesario), dejamos estofar (proceso de cocción que a fuego lento y tapado) durante al menos 25 minutos.
Si le vamos a poner las salchichas de Frankfort, las cortamos en 8 partes cada una.
Incorporamos las salchichas de Frankfurt y damos unas vueltas con la espátula y cocinamos 5 minutos más.
El resultado es unas alubias que se deshacen en la boca, rodeadas por una salsa gelatinosa muy dulce.
A nosotros nos gustan con salchichas de Frankfort.
Servimos calientes, con tostadas y salchichas, huevos, patatas y bacon.
Es frecuente en el Reino Unido preparar los beans on toast (una tostada con huevos revueltos, recubiertos de alubias).
6 raciones
100 g
* El % del valor diario (VD), indica cuánto contribuye un nutriente a la ingesta diaria, de un adulto medio (8400 kJ / 2000 kcal).